Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS
Señor consejero de Educación: le confieso mi perplejidad, no sabía que Cristo tuviera legionarios ni que a Dios se le sirviera con las armas. Uno creía pasado el tiempo de los templarios, pero gran equivocación, porque los legionarios de Cristo existen y además ganan concursos de su Consejería. Según el informe técnico, la firma que los ha contratado ha superado a la empresa rival en todos los puntos, salvo en el precio. Es que Dios, cuando se pone a hacer cosas, le salen muy bien y todavía le rasca tiempo a la semana para descansar.
Los monitores de Juvenalia serán seleccionados por IUVE, asociación vinculada a estos legionarios del Señor y que serán, sin duda, jóvenes entusiastas de los que cantan en el coro los domingos, de los que se dan a la prudencia y no al botellón. Sé que con su negociado no tiene nada que ver, pero estará conmigo en la limpieza de imagen que se le está haciendo a la juventud. Con la excusa del voluntariado y ahora con Juvenalia, hemos recuperado la chispa de la vida. Adiós a esos melenas desastrosos, inciviles desertores, roqueros, disidentes y amantes del humo de Ketama, (localidad marroquí donde hasta los mosquitos vuelan colocados por el pedal que desprenden las hojas verdes). Lo que puede pasar, e igual ahí me da usted la razón, es que con los legionarios de por medio acabemos resucitando las montañas nevadas, el Castillo de la Mota y el servicio social para ellas. Y eso no es una crítica para su partido, porque también Zapatero se lució al proponer un Ministerio de la Juventud. Decía Jardiel Poncela que definir la poesía es como pinchar alas de mariposa con postes de telégrafo.
Los jóvenes son cualquier cosa menos una corriente apta para ser regulada por decreto. Y tienen derecho a la diferencia por encima de la uniformidad, y a ser distintos en la tolerancia.De otro modo, acabaremos como en algunas partes de los estates, donde, o eres scout, o te quedas en casa aburrido. Ya sabe, esa gente que cree que los jóvenes sólo están preocupados por las ardillas y miran con asco la portada con la playmate del mes de julio. Allí acuñaron la frase de: «los exploradores son 100 niños vestidos de gilipollas que siguen a un gilipollas vestido de niño».
Eso no pasará en nuestra Comunidad, estoy seguro. Ahora bien, al saber lo de los legionarios he sentido un pálpito, igual que cuando veo desfilar a los armaos de la Macarena ¿Le harán falta soldados romanos a la Virgen? ¿Vuelve Millán Astray? Y Franco, ¿qué opina de esto?
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