Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS
Estimado alcalde de Madrid: una pasta en sellos me va a costar esta carta, no sé dónde enviársela porque últimamente está de lo más viajero. Ayer en Berlín, hace poco en Brisbane (Australia), dentro de unos días en Ghana y en julio a Singapur, sin descartar que salte el guión e improvise algún otro viajecito motivado por la causa olímpica. Ahora entiendo por qué las compañías aéreas bajan las tarifas: con usted tienen asegurado el lleno del pasaje, a esto se le llama hacer política por millas, cuántas más mejor.Dispuesto a batir el récord de Willy Fog y a rozar la velocidad de la luz con todo tipo de documentos bajo el brazo, desde Pierre de Coubertin hasta la fecha no se conocía a otra persona que pusiera tal entusiasmo a los cinco aros, (eso le honra). Lo de Brisbane fue magistral: ida y vuelta en cuarenta y ocho horas, menudo estrés para el piloto que se vio obligado a buscar atajos.
Va tan rápido señor Gallardón, que cualquier día se encuentra con usted mismo que sale de casa saludándose por rutina: «hola, buenos días; hola, buenos días». Eso avalaría la tesis de que tiene un hermano gemelo: uno que trabaja en la Alcaldía y otro que sale de viaje. Por lo tanto peor para sus enemigos porque Gallardón clonado es una epidemia para los rivales y una pesadilla para los del partido. Igual los ataques que le lanzaron en el pasado han provocado esta peculiar mitosis, sus células se han dividido dando origen a dos cuerpos semejantes. Consecuencia: un sin parar, un continuo voy y vengo que agota al más pintado.Hasta ha dejado tiesa la banda magnética de la Iberia plus; tiene tantos puntos almacenados que se podría llevar a casa un 747 y ponerlo en el jardín.
Berlín bien vale unas prisas como diría un castizo. Cuentan que ayer le aclamaron porque puso corazón en sus palabras, metafóricamente se quitó la corbata, se descamisó de intención para arriba. Está visto que para presenciar su lado más pasional vamos a tener que seguirle en los partidos que juegue fuera, como hacen las peñas. De continuar con este ritmo va a hacer más giras que los Stones, el Gallardón Tour 2005 no cabe en la espalda de una camiseta.Sus fans estamos dispuestos a seguir los partidos que juegue fuera de casa con bocinas y la pulserita olímpica, (le he puesto una al canario en la pata). El vídeo con su intervención ayer en Berlín es de lo más cotizado en el top manta, como se lo cuento.Tal y como están los ánimos por Madrid no nos vendría mal una paz olímpica, así que usted siga triunfando. Va a ser la primera vez que una llama en vez de incendiar apague un fuego. ¡Ale!, y no olvide el cepillo de dientes.
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