Podía titular esta entrada como “Otra de monaguillas” pero no sería exacto.
Acaba la penitencia y resurge la carne, pero antes de que eso se produjera yo me encontré una exclusiva en la calle. ¿Dónde si no?, en la calle está la mayor aventura que se pueda captar, y de manera improvisada, libre de guiones y de prejuicios. Uno camina calles porque el hombre está hecho de curiosidad y sostenido por dos pies.
No hay que fiarse de las primeras impresiones porque no siempre se mira bien.
Podría ser Elsa Pataki con un cirio en la mano y mantilla.
Hete aquí que uno aprovecha una parada y pregunta y pide que pose.
Entonces se entiende el temblor inicial.
Es la carne resurrecta que pregona la primavera con todos sus abalorios y sus puntillas negras, a mitad de camino entre el morbo y la devoción. Otra de las razones para ser creyente, en la carne, en la que se tuesta, en la que envejece, en la que se echa a perder, pero de momento a ella le sienta muy bien el oficio de penitente.
La pregunta es, obviamente, ¿por qué los de la banda llevan plumas en el casco?
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Hay madre! cuánto tiran dos….buenas razones! Que hasta la penitencia es un deleite para más de uno/a!!
ay!!
¿Qué tal lleva Ud la Semana Santa?
Un abrazo!!
No sé si se nos será permitida la entrada a las chicas maduras en esta primaveral etapa de tu blog. Siendo del Sur se comprende tu devoción…Me alegra haberte recuperado..
Victoria
Divinamente.
No se puede ser más parco en palabras….
Victoria
Victoria: es la emoción la que me impide añadir nada más.
Te tengo entre las primaverales, por lo tanto estás en tu casa. Yo también me alegro de este tiempo que tantas vocaciones ha marcado.
Vaya ambientazo (y no lo digo por el del penacho de plumas) hay en la Semana Santa de nuestra tierra… Entre Banderas desafinando, Borja Thyssen de costalero-chic y esto, la verdad es que parece Pachá Ibiza, con todos mis respetos por Pachá Ibiza
Jajaja, Silvia, ¡lo has clavado!, (nunca mejor dicho porque todo está construido alrededor de un “clavado”). El ambiente es de “mayor dolor”. Por cierto que el domingo vi en la Catedral al trono de la Virgen que lleva Banderas de capataz, pero como iban con la cara tapada no sé quién era.
En otra de las entradas dejé unas fotos.
Nuestra tierra es de permanente devoción por la vida, lo de Pachá Ibiza vino muuuucho después, antes estaban las monaguillas aferradas a una vela, las rubias con mantilla y esos tipos del penacho que, sin duda, rinden homenaje a “las” Locomía.
Si es que los de torroles siempre estamos en la vanguardia…