(Publicado el lunes 10 de enero de 2012 en las cabeceras del Grupo VOCENTO)
Rubalcaba y Chacón se sientan juntos en la Ejecutiva del PSOE pero también podrían situarse espalda contra espalda, tal y cómo empezaban los duelos del XIX. Se buscan un par de padrinos y ya la tenemos organizada. Toda la batalla por el poder del PSOE responde al esquema de un “duelo al Sol”, tanto en fondo como en forma: se trata de que sobreviva uno de los dos y la principal batalla se va a librar en Andalucía dónde Griñán puede pagar los platos rotos de ambos contendientes.
La herencia de Zapatero es perversa, además no olvidemos que el actual secretario general todavía lo será hasta llegar al congreso del mes que viene. Zapatero lleva mucho tiempo diciendo adiós pero aún no se ha marchado del todo, o al menos no lo ha hecho del puesto de mando en el partido, pero su anuncio provoca una pelea por el sillón que se prolonga demasiado en el tiempo y quizá no en un momento oportuno para los intereses socialistas.
Otra cosa es que el PSOE hubiera ganado las elecciones y Rubalcaba turnara poder con Chacón para formar un ticket que cubriera desde la vieja guardia a los experimentos de diseño, pero sin poder nacional o regional la pelea se torna más amarga. Esto mismo se explica en los documentales de La 2 cuándo los osos pelean por un mismo territorio: zarpazos vamos a ver y también algún herido. La jugada de Carme Chacón es dejar a Rubalcaba como autor de las pinturas de las cuevas de Altamira: lo más alejado de un futuro PSOE 2.0 y quedar ella de redentora de causas perdidas. La maniobra de Rubalcaba es presentarse como el líder que conoce mejor el aparato y que ha estado en todas las etapas posibles. Y no descartemos la aparición estelar de Bono al que le gustan los saltos escénicos más que a nadie, una cosa es que se haya retirado de la primera fila pero otra que haya renunciado a tener poder en el partido, o a influir sobre el mejor candidato posible que para él no es Chacón.
Mientras en el Partido Popular han sacado entrada de platea para no perderse lo que va a ocurrir en los próximos días; de momento no hay nada más cómodo que gobernar sin tener oposición enfrente. Hasta que se aclare la batalla interna del PSOE el PP tiene la ocasión de hacer entrenamientos con público en las sesiones del Congreso, no va a encontrarse con una oposición mordaz que pregunte de manera capciosa, no va a tener problemas para presentar propuestas. El escalafón ha corrido de tal manera que le va a corresponder a José Antonio Alonso dar la réplica a Rajoy, lo que se conoce por un correturnos de circunstancia.
Chacón ya tiene encargado el paseo triunfal en calesa por las calles de Sevilla, lo que no sabe es que Rubalcaba es el hombre que susurraba a los caballos, (y al partido).
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Etiquetas: opinion