Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS
El titular suena cursi de narices pero es el resultado de las buenas relaciones del Ministerio de Fomento con la Comunidad de Madrid. El ministro José Blanco y el consejero Antonio Beteta han llegado al romántico acuerdo de recuperar el castillo de Manzanares El Real y ya de paso remozar el ala este de las Casas de Oficios del Palacio de Nuevo Baztán. A mí que me expliquen esta reconversión fulminante de José Blanco, otrora látigo de la “derechona” convertido en patrono de sueños medievales y de jardines alquímicos. ¡Que se besen, que se besen!, se escucha en las calles de Madrid.
Dicho esto sin acritud sino con la mayor de las admiraciones porque cuando se da la colaboración institucional es algo tan estupendo como insólito. Hace apenas cuatro meses Beteta y Blanco hubieran quedado en el castillo de Manzanares El Real pero para retarse a sable, o para arrojarse aceite hirviendo desde las almenas. Es de admirar cómo las posturas se acercan, a ver si va a tener razón el ministro cuando habla de la Puerta del Sol como la mejor de las “cercanías” de Europa.
Ya metidos en el jardín alquímico, (supongo que será como todos pero con avispas de diseño), se pueden aventurar algunas conclusiones. Una de ellas podría ser que el actual ministro se está trabajando la candidatura al Ayuntamiento de Madrid a través de la senda verde y de las “cercanías”. Si Gallardón subiera a los cielos olímpicos igual que Elías ascendió en un carro de fuego, (Eliseo lo vio según La Biblia), entonces a Blanco se le pondría cara de “alcaldable”.
Para brotes verdes los que da un jardín y mucho más si es alquímico. Ahora sólo queda esperar a que florezcan las plantas y en función de su olor sabremos que pregonan de futuro.
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Etiquetas: madridiario.es, opinion