Entradas etiquetadas como ‘el mundo’


El hombre que creyó en el milagro

noviembre 18th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Presidir una empresa cuyo capital es cien por cien emotivo, no debe ser fácil. Y Alejandro lo consiguió, con él Estudiantes se doctoró. Fue capaz ponerle cabeza a un sentimiento en un club donde la lógica no entra en la nómina, gracias a él Estudiantes pasó de ser un equipo de patio de colegio a un aspirante a todo. Lo mejor es que hizo magia con los ingredientes que había en la casa: con Pepu Hernández de entrenador, con Nacho Azofra, con los hermanos Reyes, con Alberto Herreros, Bárcenas, Iñaki de Miguel y unos cuantos conjurados más. Alguien diría que fue una solución muy imaginativa pero es que no le quedaba otra, y acertó. Varios jugadores canteranos apoyados por una pareja de extranjeros, Thompson y Vandiver, crearon un equipo peleón que se codeó con los ricos, (en varias ocasiones el aro escupió el balón de la victoria con reiterada crueldad). La fórmula era aplicar el descaro de los que no tienen nada que perder y mucho que ganar. Jugaban a la yugoslava y se divertían como indios tratando de invertir la lógica y llamando a Dios de tú. Si otros tuvieron el poder ellos jugaron con la poesía. Fueron tan insolentes que pellizcaron el milagro.
Alejandro González Varona le quitó horas a su trabajo como empresario, y a su familia, (Marisol le acompañaba en el palco por aquello de conciliar oficio, pasión y hogar. Ella fue su mejor fichaje). Se empeñó en reflotar un club condenado al fracaso económico y a un futuro embargado literalmente. Y mientras buscaba patrocinadores los triples iban entrando y los pivots bajitos parecían gigantes con zancos y cuatro brazos. Crecía el número de socios y los toreros salían a saludar cada vez con más frecuencia después de una nueva victoria; los gritos en el viejo pabellón de Felipe II se escuchaban en Colón. Demasiada insolencia para un equipo modesto. Todo con mucha moral y con medios muy limitados que nos llevan a pensar, hoy, qué hubiera podido haber hecho de haber presidido un club con más recursos.
En la NBA su nombre estaría en el ?hall of fame?, aquí en la tierra media que ocupa la ACB su recuerdo queda grabado en la cantera del club, en esos patios del Ramiro donde con una mano se bota el balón y con otra se come el bocadillo de la merienda. Ayer le iban a dar una insignia de oro y diamantes pero él prefirió marcharse sin hacer ruido, así era su grandeza de carácter. Es normal que quién desdeñó el elogio no tuviera tiempo para homenajes.

Compartir:


Una victoria cantada

noviembre 18th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Hacia un frío de mausoleo, un frío seco, técnicamente un frío de pelotas por aquello de honrar al Dios del balompié. La selección estrenaba camiseta que debería haber sido de felpa para engañar a la noche; en cambio los suecos jugaban en manga corta porque allí hasta que un oso polar no salta al césped no dan por comenzado el invierno. Con esa temperatura en Malmoe cenan en las terrazas con una rebequita, pero aquí tenemos que hacer la ola para entrar en calor.
En la presentación de los equipos nos pudimos dar cuenta de un par de detalles relevantes: nos falta la letra del himno y Tamudo entre suecos es un efecto colateral del landismo, hay tópicos que siguen igual con el paso de los años. A falta de letra se impone el ?chunda-chunda? porque somos un país más de onomatopeyas que de rimas consensuadas, pero ese entusiasmo popular debería estar compensado con unas merecidas estrofas. Hágase, escríbase, apruébese y por último cántese. Daba envidia ver a los suecos entonar un himno que debe estar compuesto por el mismo autor de la sintonía de ?Dinastía?, (no es un prodigio de elegancia melódica), se lo deberían haber encargado a los ?Abba?. El planteamiento táctico inicial hasta que llegó el gol de Capdevilla, parecía ser un calco de nuestras relaciones con Venezuela, un fútbol callado como si Aragonés estuviera abducido por Moratinos. El seleccionador nacional pisaba el césped con cara de muy pocos amigos, y a lo mejor tenía razón porque a su espalda vuelan los cuchillos como objetos del cuarto de la niña de ?El Exorcista?. Los últimos encuentros no hacían presagiar una lambada de felicidad contagiosa, los antecedentes no podían ser más cenizos. Así que en esa ardua tarea inicial de monjes de clausura, de un equipo que llevaba responsabilidad atada en los pies en lugar de botas, Xavi ejercía a la perfección de monomando, daba pases en todas las direcciones y sentidos. Era una España coñazo pero muy reconocible, éramos nosotros mismos sin lugar a dudas. El segundo tanto, el de Iniesta estuvo perfecto para que la gente pudiera abrir los bocadillos en el descanso sin ese nudo en el estómago que provoca la angustia de la incertidumbre y el estar lejos de un europeo. Aragonés sabía que de perder en el Bernabéu, y sin Raúl en el equipo, el relleno del bocadillo sería él mismo aunque su carne esté dura.
Si pusiéramos una cámara lenta al 3-0 de Sergio Ramos veríamos que de los dos mortales que da tras meter el gol, al menos medio tirabuzón lo dio Luís Aragonés en el banquillo y eso que no eran horas, ni edades. Luego vino un cierto juego de tacón, un Joaquín a lo brasileño y una alegría contagiosa, (el Bernabéu convertido en Maracaná II). Entonces el frío de las castañas asadas pasó de los españoles a los suecos, hasta Ibrahimovic se volvió un guiri por despistado por La Castellana, y eso que venía de quebrantahuesos. Los suecos amarillos sólo tiraron a puerta una vez y antes de acabar el partido, para quedar bien sin mucho molestar.

Compartir:


Los ratones coloraos

noviembre 15th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Los ratones del despacho eran un movimiento disuasorio, parte de la estrategia nada más, pensábamos que la caza del roedor era lo más arriesgado que se podía hacer en la Plaza de Cibeles. La fiesta, o ?guateque?, estaba en otros negociados, (por cierto que el nombre de la operación recuerda a lo de ?saca el güisqui cheli?, poco serio). Estábamos pendientes de las rendijas del nuevo Ayuntamiento y el butrón informativo surgió por la parte de urbanismo que siempre es un departamento difícil de sellar; ante la presión de la corruptela saltan la silicona y el climalit que da pavor. Es el poder del dinero que todo lo engrasa y todo lo agiliza, con pasta los cojos corruptos son capaces de ganar una final de cien metros. Los detenidos parece que agilizaban trámites en función de la mordida, eran una cooperativa de buenas voluntades que desastacaba los expedientes y los hacían más ligeros.
Lo prudente es prestar colaboración a la justicia y esperar nuevas informaciones, justo lo que hicieron el alcalde Gallardón y el vicealcalde Manuel Cobo, el término cooperación salía subrayado con fluorescente de sus bocas. Lo que no es de recibo es la sombra de sospecha que Rubalcaba lanza como el que quiere pescar peces gordos con redes de chanquetes. Las palabras del Ministro del Interior son unos puntos suspensivos negros sobre la clase política instalada en el Ayuntamiento de Madrid, sobre todo cuando afirma: ?hay funcionarios implicados y otros que no son funcionarios?. Si lo sabe que largue, y sino que guarde silencio para siempre como dicen en las bodas. Como tampoco es casual el desembarco de fuerzas que tanto recuerda a una forma ?malaya? de instruir desde un juzgado. Semejante brío se echó en falta en otros lugares de Madrid, como Ciempozuelos donde se fue más cauto. Será que hay una forma de entrullar de derechas y otra de izquierdas, según convenga.
No estaría de más que el alcalde Gallardón siguiera con la limpieza que ha empezado con los ratones de su despacho, (y que le han convertido en un Gallaorduille de la Ville). Igual con un poco de queso y unas trampas se coge a los del guateque con las manos en la comisión y la pasta calentita. La oposición le recuerda, con tino, que parte de sus obligaciones son tener controlado el Ayuntamiento y que también se peca de falta de cuidado. Un poco de control interno es necesario cuando se gobierna un Ayuntamiento de dimensiones casi de ministerio, (sin segundas intenciones). Metidos en el ?guateque? podríamos cantar otras canciones, tal vez la de ?si yo tuviera una escoba?, muy adecuada para dejar el suelo limpio de ?corrutos? como diría Pepiño Blanco y de ratones coloraos, azules y comisionados.

Compartir:


Protestas por un tubo

noviembre 12th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Quejarse con un casco en la cabeza es como recitar versos de Lope de Vega con un yelmo, imposible. De ahí que los moteros se concentraran en Madrid para tocar el claxon a la desvergüenza administrativa, por eso se quitaron la protección de la cabeza para gritar con mayor fuerza. A pie y con la montera en la mano pusieron a escurrir a quién corresponda, (mucho han tardado). Madrid durante unas horas fue tomada por el colectivo más débil de las carreteras, (y ciudades), españolas. A pesar de las protestas, a pesar de las quejas, las distintas administraciones no han hecho nada significativo. En cuanto al Ministerio de Transportes aún están pendientes de estudio retirar esas guillotinas de las cunetas, la Comunidad de Madrid no ha vuelto a tocar el caso desde Luís Eduardo Cortés, y el Ayuntamiento silba cuando un camión de la limpieza moja un paso de cebra y lo convierte en un circo sobre hielo para moteros incautos.
No hay otro colectivo que pague los desaciertos ajenos con tan alto número de bajas. El motero es un forajido sobre dos ruedas al que se le tiene muy poco en cuenta, tan sólo como carne de estadísticas y para echarle en cara que sufra accidentes, como si caerse fuera un placer indoloro de alegres consecuencias. La falta de respeto oficial sobre el usuario de la moto es atronadora; mucho recomendarla como transporte alternativo pero luego se decoran los pasos de cebra con estética pintura de cristal, y se cascan unos bolardos en las aceras que te rompen el tobillo si no vas atento. Ya me gustaría saber quién es el listo que pinta las rayas blancas con relieve para que el manillar tenga turbulencias si te cambias de carril. Los quejosos de las motos, los «abajo vociferantes» exigen algo tan insólito como volver a casa tal y como han salido, y no acabar cortaditos en rodajas por culpa de un guardaraíl camuflado entre hierbajos. Puede que estén picados con la autoridad y que anden más calientes que un tubo de escape, (»picados» tal vez por no acabar hechos picadillo). Es sólo en defensa propia.

Compartir:


?Las tragedias no son en color?

noviembre 9th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Orígenes: Madrid, 1967
Currículo: con doce años le regalaron su primera máquina de fotos, una ?Nera 35?, y desde entonces no ha parado. Comienza en el Periodismo en el año 1987 en ?Diario 16?, de ahí pasa a ?El Mundo?, (diario en el que formó parte del equipo fundador). Quintela ha cubierto guerras y ha sido corresponsal en La Habana. Su cénit profesional fue captar a Felipe González declarando en el Tribunal Supremo, en 1998, con una cámara oculta. Actualmente es director de ?El Mundo Tv?.
Aficiones: ?la fotografía, viajar y conocer gente?
Debilidades: ?la vagancia, il dolce far niente?.
Virtudes: ?amigo de mis amigos, paciente y sé respetar?.
Defectos: ?la debilidad, la dependencia afectiva y algo de inconstancia?.

——————————————————————————

La exposición de Fernando Quintela es una cuestión de arte, pero también una denuncia. Le ha puesto de nombre unas coordenadas que dan un punto en el Mar del Cayuco, en el corazón de la miseria. Las fotos que se exponen en el Museo de la Ciudad narran el valor, y la osadía, de un fotógrafo que retó a la muerte. Ellos (y Quintela) pagaron tres mil dólares por billete al paraíso. Ellos (y Quintela) estuvieron a punto de ahogarse. Ellos (y Quintela) salieron vivos pero no del todo indemnes. La aventura siempre pasa factura aunque tenga un final feliz. No es casual que las fotos sean grandes, como grande es el episodio que denuncian.
PREGUNTA.- ¿La miseria da bien en foto?
RESPUESTA.- Sin duda que la miseria es atractiva, por desconocida y por el morbo que la rodea.
P.- ¿El público capta el drama o se queda en la estética?
R.- Muchos de los que han visto la exposición dicen que las fotos son bonitas, no todo el mundo es capaz de leer el mensaje a través de una fotografía.
P.- ¿El miedo es en blanco y negro?
R.- El miedo, como el drama, como el pasado, como las pesadillas, es en blanco y negro. En la Guerra de Ruanda Sebastiao Salgado me enseñó que las tragedias no son en color.
P.- ¿Tiene pesadillas con el cayuco?
R.- Sí, yo creo que me sirven como catarsis para expulsar el miedo. Por las noches llegan los demonios.
P.- ¿Oscuros, como grabados de Goya?
R.- Sí, efectivamente así son, también en blanco y negro.
P.- ¿Ha ?hecho? las fotos o las ha vivido?
R.- En el reportaje lo pasé muy mal, llegas a tener sentimientos de complicidad con el desastre.
P.- ¿Aquello pudo acabar mal?
R.- ? muy bien, o muy mal, depende como se lea la muerte.
P.- ¿Los ?negreros? hablan muy claro?
R.- Es muy fácil entenderse con ellos, son los mismos en todos los países. Su reacción la puedes manejar a la vista del color del dinero.
P.- ¿Pensaban que podían ahogarse?
R.- Sin duda, de hecho nos engañó con la barca y no puso la gasolina, ni el agua, suficiente para llegar a Canarias.
P.- ¿Los ?negreros? no tienen pesadillas?
R.- Son auténticos canallas con la conciencia bien tranquila.
P.- ¿Conoció la mar arbolada?
R.- Estaba tan arbolada como si fuera un bosque de secuoyas.
P.- ¿Es un superviviente?
R.- Yo soy una persona con suerte por todo lo que hecho.
P.- ¿Qué fue de sus compañeros?
R,- Tengo relación con dos de ellos que no quieren volver a intentar esa locura, quizá alguno de los que iban a bordo lo haya vuelto a intentar.
P.- ¿No merece la pena el riesgo?
R.- Por mal que estén en sus países deben dar el salto allí para cambiar su vida, deben dar un salto interior.
P.- ¿África es la ?puerta de atrás??
R.- Visto desde Europa, África es el jardín olvidado en el que a nadie le apetece construir. Se piensa en África como lugar de cacería.
P.- ¿La foto debe ser pensada?
R.- Las fotos no se pueden pensar, son un instante en el que ves y disparas. La foto del reportaje no se piensa, surge.
P.- ¿Qué es poner cara de foto?
R.- Aquel que mira a la cámara y no al fotógrafo. Los protagonistas de mi exposición miran a quienes les miran, no miraban a una cámara.
P.- ¿En algún momento perdió el humor?
R.- El humor te rescata de la tragedia, pero cuando más pasa el tiempo más me afectan los retratos que he hecho.
P.- ¿Siempre quiso ser reportero de guerra?
R.- Es una cuestión juvenil a la que acompaña el mito. Yo probé en dos guerras hasta que ví que no era lo mío.
P.- ¿El amor está reñido con la guerra?
R.- En la guerra hay un sentimiento de la vida más puro, la vida es cada momento presente que se experimenta con mucha intensidad.
P.- ¿Madrid es ciudad muy gráfica?
R.- Es absolutamente plástica, cualquier rincón de Madrid tiene una foto genial.
P.- ¿Ha dicho plástica o ?plasta??
R.- Madrid es muy plástica y muy plasta, también. Ya no disfruto Madrid, no vivo la ciudad como antes.
P.- ¿Leonardo habría sido fotógrafo?
R.- Fue el padre de la fotografía, el inventor de las cámaras oscuras.
P.- ¿Sin una buena luz no somos nadie?
R.- La luz es básica, por eso me gustan Cádiz, Valencia y La Coruña.
P.- ¿Cómo sería una foto de Gallardón y Aguirre juntos?
R.- Pondría a Aguirre y Gallardón enfrentados, cara a cara, mirándose como el cartel de una película romántica.

Compartir:


El chirimbolo florece en otoño

noviembre 5th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

No preocuparse: ha dicho el alcalde que será flexible en cuanto a las quejas de las pantallas gigantes; ha dicho que estudiará las reclamaciones con detalle; ha dicho que ningún vecino será tapiado por un cartel de publicidad; será flexible por tanto por la parte del chirimbolo. Gallardón, de nuevo, va a exhibir una elasticidad de primera bailarina del Bolshoi; igual que existen los globos sondas en Madrid hemos inventado los chirimbolos sondas que son otra manera de crear debate.
La polémica ha servido para que el personal sepa qué eran exactamente esos marcianos de cabeza cuadrada y patas largas que se habían adueñado del paisaje y le había arruinado sus vistas. Al principio parecían mutaciones carnívoras de ficus metálicos, luego unas pantallas gigantes para ver el fútbol creativo de Luís Aragonés, finalmente hemos conocido su utilidad real y que no es otra que servir de escaparate a Belén Esteban cuando anuncie una depilady. Ahí es cuando estalló un nuevo e improvisado motín de Esquilache: el madrileño no está por la labor de tener frente a su ventana el muslo de la Esteban a todo color, y a todo pelar. Eso sin tener en cuenta la opinión de las estatuas, al pobre Velázquez le han colocado un pantallón tan cerca que ha tenido que echar la perilla para atrás en señal de presbicia histórica.
El alcalde está por agradar, se lo dijo a uno que hacía de indio en Las Ramblas de Barcelona, las plumas que estaban cerca de su oreja pudieron escuchar que Gallardón no iba a talar un árbol del Paseo del Prado y tampoco iba a imponer el ?chirimbolismo?. Toro Sentado fue el primero en saberlo. En esta semana de traslado de la Casa de la Villa al Palacio de las Telecomunicaciones, (lo de Palacio no le gusta al alcalde, pero lo es), hay cierta amnistía municipal, se nota el ?buenrollismo?. Se abrazan indios, se sonríe a los turistas, se pasa página al 11-M y lo que haga falta con tal de que se hable poco del despacho del regidor, un ámbito de trabajo que se mide en megametros cuadrados. Contado en pantallas son doce chirimbolos de los que abortan el paisaje de Madrid, traducido a lenguaje de publicidad son innumerables muslos de la Esteban los que caben en el despacho.
Con los parquímetros hubo menos suerte, pero con los chirimbolos parece que ha podido la presión ciudadana. Y de paso le han dado la razón a la baronesa Thyssen que estaba muy preocupada por la guerra de la clorofila. Ella, como Chanquete, cantó el ?no nos moverán?. Los afectados por el ?chirimbolismo? cantan el ?no lo instalarán?. De momento parece que no.

Compartir:


El lobo sigue en el bosque y Caperucita lo ignora

noviembre 4th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Antes de que el juez Bermúdez tecleara la recta final de la sentencia, mucho antes de que pusiera fin a los hechos probados, el sumario del 11-M ya era usado como garrote bitensión, (vale igual para el Gobierno que para el PP). Tan animada está la pelea que los participantes ignoran lo básico: la sentencia debe dar satisfacción a las víctimas y éstas se sienten frustradas, por lo tanto empezamos mal la reconstrucción moral de una catástrofe colectiva. Aunque resulte increíble el tribunal no redactó un texto para echarle tierra a los ojos a Acebes, o a Blanco, sino el mejor texto posible de los hechos probados durante la vista. Y, a tenor de los enormes huecos que deja, durante la instrucción quedaron unas dudas más que razonables que llevan a la melancolía, y señalarlas no es tener carnet del Club de la Amistad presidido por Ángel Acebes. Son las víctimas las que muestran su descontento y la mayor parte de las portadas de la prensa internacional que recoge lo incompleto del fallo. Parece que hay que conformarse con que a la banda ETA no se le cite en ninguna parte y echarle la culpa de todo a la prensa que muestra su disconformidad, ?¡qué le pongan unos cascabeles a Jiménez Losantos!? se ha llegado a escuchar. ¿Entonces quién tramó un argumento viscoso que provocó el mayor atentado de la historia de España? Al descansar las conciencias en los terroristas de Leganés todo se justifica en aquella explosión brutal que acabó con sus vidas, pero igual les estamos dando un poder bélico que no tenían esos desgraciados. Tratamos a los suicidas de Leganés como si fueran el mejor comando entrenado por Rambo, capaces de muñir una estrategia de guerrilla urbana más elevada de las que enseñan en las academias de operaciones especiales. Los de Leganés tenían una capacidad de actuación por encima de la media, eran unos turbantes verdes expertos en artes marciales: intente usted quedar con un amigo en Atocha en hora punta como para lograr que unos relojes se sincronicen en varias explosiones simultáneas. Y por ahí nos adentramos en el silencio de los servicios secretos, en las conexiones del crimen y en los que adoptan por costumbre robar algo de dinamita por si algún día viene un tipo de Tetuán a preguntar si tienen mercancía.
En esta revisión del cuento el lobo se ha hecho cazador y la madre de Caperucita duda entre dejar a la niña que cruce el bosque con su desparpajo adolescente, o comprarle un antibalas por lo que pueda pasar. El lobo, ya tenga turbante o alas de ángel custodio, respira fuerte en la sombra, busca el camuflaje de las ramas y guarda silencio; que se haya adentrado cien metros más en el bosque no significa que no vigile. Con estos ?pequeños flecos? que deja la sentencia se pueden hacer varias colchas de dudas, de las de nudo grueso para un invierno que llegará hasta finales de marzo. Al no señalar al muñidor de la masacre dejamos abierta la puerta a que ésta se pueda repetir; sólo conformarse con que ETA no andaba por ahí no es suficiente, ¿quién lo encargó y con qué motivos? Vaya usted a saber por qué desde que se hizo pública la sentencia, (y ya es casualidad), el monumento de las víctimas de Atocha se desinfló. La explicación técnica es que un fallo le ha quitado presión a la sala, (¡justo!, eso es), y ese fallo dejó a la sala falta de lustre, es un error semantico-froidiano que simboliza muy bien un estado de ánimo. Pero las víctimas son las grandes olvidadas, tendrán que caminar el resto solas. La noticia es que el pen-drive con la sentencia es utilizado como garrote de dos españoles que se pelean en el barro, una imagen que Goya adelantó hace doscientos años, mucho antes de que se plantaran las vías del tren de cercanías.

Compartir:


?Aquí tenemos una vista de muerte?

noviembre 1st, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

?Desde aquí tenemos una vista de muerte de Madrid?/ ?No hay un cementerio tan grande como éste, los puede haber más monumentales pero no tan extensos?/ ?Desde que abrieron un instituto próximo los chavales vienen a pasear a la hora del bocadillo?/ ?Hay otra vida mejor pero a contarlo no ha venido nadie?

Orígenes: Canales del Ducado (Guadalajara), 1946
Currículo: comenzó en La Almudena como jardinero en 1969, ?en los primeros días miraba para atrás como si me fuera a pasar algo?. Al mismo tiempo trabajaba en una compañía de seguros? pero le pudo el oficio en el cementerio, ?no es que sea un gran ecologista pero me gustan las flores?. Es funcionario municipal en excedencia y desde 1986 trabaja en la Empresa Mixta Funeraria de Madrid.
Aficiones: ?la caza, jugar a la pelota vasca (fui jugador) y pescar?.
Debilidades: ?debería dormir más de lo que duermo?
Virtudes: ?ayudar a los demás, comprenderlos y muy comunicativo?
Defectos: ?ser demasiado perfeccionista no ayuda mucho?

——————————————————————————-

Gabino es el alcalde de la ciudad de los muertos cuya capital es La Almudena, una de las colinas de Madrid. Un cementerio que es la memoria llorada en unas lápidas que sirven de última tarjeta de visita. En esa tierra común acaba la vanidad, la insolencia, el genio y las fachendas; la muerte iguala y silencia. Gabino se desenvuelve con naturalidad entre tumbas y nichos, los trabajadores le conocen, es el jefe del camposanto, el más vivo de entre los muertos. A pesar de la mañana soleada corre un viento helado muy propio de primeros de noviembre.
PREGUNTA.- ¿Otra vez el frío de los muertos?
RESPUESTA.- En los cementerios hace frío porque son campos abiertos, el jardín ayuda a que la temperatura sea más baja. Si además hace viento da mayor sensación de frío.
P.- ¿En La Almudena hay buenas vistas?
R.- Por ejemplo en la quinta meseta que está bien alta, desde allí se observa muy bien.
P.- ¿Es una gran vista?
R.- Desde aquí tenemos una vista de muerte de Madrid.
P.- ¿Aporta serenidad trabajar en un cementerio?
R.- Creo que sí, estar cerca de los problemas de los demás te ayuda a ser más humano y a recapacitar.
P.- ¿Este año preguntan por ?Las Trece Rosas??
R.- Están cerca de la puerta de O?donnell, pero no fueron fusiladas allí sino en la tapia antigua de la que apenas queda un fragmento.
P.- ¿Aquello se derribó?
R.- En el año 1950 se hizo la última ampliación del camposanto y desapareció el muro, (contra él se hicieron los fusilamientos).
P.- ¿El cementerio puede crecer más?
R.- No, el Plan de Ordenación Urbana de 1984 se fijó en otros lugares de Madrid para hacer nuevos enterramientos.
P.- ¿Cuántos campos de fútbol son La Almudena?
R.- Son ciento veinte hectáreas de terreno? La Almudena son ciento veinte campos de fútbol.
P.- ¿Es la gran necrópolis de Europa?
R.- No hay un cementerio tan grande como éste, los puede haber más monumentales pero no tan extensos, (el de Milán tiene sesenta y ocho hectáreas).
P.- ¿Es usted el alcaide de los no vivos?
R.- En el día en el que me llegue el momento me jubilaré orgulloso de haber hecho cosas positivas para los ciudadanos de Madrid.
P.- ¿En qué se notará su mano?
R.- Desde 1978 me empeñé en que los entierros de temporalidad fueran en nichos, y no en sepulturas, para evitar los desagradables traslados de restos. Lo conseguí en 1984.
P.- ¿Lo más duro es una exhumación?
R.- Hasta el tercer cuerpo salen reducidos pero luego hay que bajar a por otros dos o tres que salen enteros; a partir de un metro treinta no se descomponen porque no entra el aire ni la luz.
P.- ¿A todo se habitúa uno?
R.- Un trabajador que esté en la brigada de conservación pasa cuatro años antes de que pueda extraer un cuerpo.
P.- ¿Se tiene que entrenar mucho?
R.- Se tiene que entrenar con la vista? y con el olfato.
P.- ¿La muerte es un negocio?
R.- Floristas, marmolistas, personas de la calle que atienden las tumbas, (en La Almudena hay muchas señoras mayores que cuidan tumbas).
P.- ¿El cementerio es para pasear?
R.- No sólo viene gente mayor, desde que abrieron un instituto próximo los chavales vienen a pasear a la hora del bocadillo.
P.- ¿Qué encontrarán los chavales aquí?
R.- Paz, naturaleza y buen oxígeno.
P.- ¿E historias de miedo?
R.- En los cementerios cada uno tiene el miedo que quiere.
P.- ¿Le gustan las películas de terror?
R.- Yo también sentí terror cuando estaba en la oficina los primeros días, luego te habitúas.
P.- ¿Pero el miedo se vence?
R.- Y tanto. Una vez pedí al forense estar presente en una extracción de córneas.
P.- ¿Una escena de Buñuel?
R.- Pues no me impactó. Es tan natural como lo que se ve en televisión, era una cesión de un donante.
P.- ¿Va a donar sus órganos?
R.- Donaré, es mi intención pero no lo tengo escrito.
P.- ¿Después de La Almudena dónde vamos?
R.- Si somos creyentes? hay otra vida mejor pero a contarlo no ha venido nadie.
P.- ¿El cementerio es la memoria histórica?
R.- Tanto que hemos hecho un catálogo de tumbas de personajes ilustres, ha merecido la pena hacerlo. Aquí se pueden hacer rutas culturales.
P.- ¿Una ruta por tumbas de delincuentes?
R.- Delincuentes no tenemos, salvo El Jarabo.
P.- ¿Hay algo más triste que una tumba abandonada?
R.- He visto a gente que reza a las tumbas viejas y miran la lápida para ver quienes fueron.
P.- ¿Usted también les reza?
R.- Indudablemente porque soy una persona muy creyente.

Compartir:


Cien años de la calle grande

octubre 29th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

La Gran Vía cumple cien años y está mucho mejor que Rafaela Aparicio cuando rodó ?Mamá cumple cien años?, de Carlos Saura. En realidad la Gran Vía está más lozana que todos los que nos tenemos por más jóvenes. Ha pasado por la edad del tranvía, por la del gasógeno, por las bombas que caían en la acera de los pares, por el ?hemos pasao?, por el subidón en descapotable que se dio Eisenhower con Franco, algunas fiestas de la bicicleta, manifestaciones y atascos como para provocar la muerte por colapso de cualquier otra ciudad con los triglicéridos en peor estado, (pero debe ser que los ictus del tráfico le dan vidilla). Y es ahora cuando afronta su primer centenario pletórica de esplendor y de encanto madrileño que puede ser chotis o rap, según se mire, letra de Agustín Lara o de Antonio Flores. O de un negro subsahariano que le pone percusión a la miseria.
Hace un siglo, cuando se derruyeron los edificios para crear el último tramo de la calle, Madrid se hizo la fimosis y creció para siempre. Por obra y gracia de la piqueta ese tramo estrecho de vía inacabada le pudo tratar de tú a la calle Alcalá, y hacer esquina para siempre. Antonio López la entendió mejor que nadie: La Gran Vía es una estampa y cada uno tenemos guardada la más entrañable. Es fácil imaginar a Ava Gadner buscando el taxi que nunca encontró a la salida de Chicote, hasta que paró un camión de la basura para que le llevara a su casa de Doctor Arce. Alfonso, el fotógrafo de lo castizo, llegó a tiempo con su cámara para inmortalizar al torero Fortuna que dio lidia y muerte a un toro bravo que se había escapado del camión, y allí mismo lo dejó ?pal tinte? con la espada que le pidió prestada a un municipal. Los clientes del antiguo Hotel Roma podrían reconocer el local, (que luego fue banco), por los lustrosos mostradores que ahora son de la Comunidad. Historias mágicas de una calle que tuvo muchos motes según la tendencia política pero que supo poner su nombre a salvo como el que sube los pies para que barran. Y que de puro libertaria siempre fue un punto de desencuentro más que una cita de hora cierta. Sus aceras son el Nilo caudaloso que no se detiene, tropezarse con alguien conocido es un apretón de manos, o besos de coletilla: ?ya-te-llamo-yo?.
Nunca fue calle de señoritos como Alcalá, ni zona noble como La Castellana, más bien ha sido cañada de paso con capital en Callao y con una montaña que es la Telefónica. Sólo le falta pista de aterrizaje para presumir de internacional, aunque para eso están los chinos que venden botes de cerveza ocultos en las papeleras. Cien años sin dormir y está viva.

Compartir:


‘Querría hablar de un Madrid en paz’

octubre 25th, 2007 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: Javier Memba

CON MUCHA CARA / RAFAEL MARTINEZ-SIMANCAS / PERIODISTA
Ayer mismo publicó su última entrevista en estas páginas, ayer mismo le fue concedido el Premio de Periodismo Mesonero Romanos, que anualmente otorga el Ayuntamiento para distinguir «las crónicas, artículos o comentarios periodísticos que mejor resalten la realidad de Madrid». Conductor asimismo de El Mundo en portada, que todas las noches se emite en Veo Televisión, El tiempo y la memoria es su último libro editado. Rafael Martínez-Simancas es un entrevistador que pasa a ser el entrevistado.
Pregunta.- ¿Orgullo o emoción? ¿Qué fue lo que experimentó tras la noticia del premio?

Respuesta.- Emoción. Me emociona que se haya reconocido mi trabajo en M2, escribiendo como escribo sobre Madrid en tantos sitios. Creo que fui el primer tipo que firmó una columna en M2, hace ya cinco años, cuando me llamó Fernando Baeta. Además es un orgullo compartirlo con periodistas como Umbral, al que se lo dieron en el año 93.

P.- ¿Cómo debería ser el actual cronista de Madrid?

R.- Alguien que tenga capacidad de crítica, que sepa narrar y que se fije muy bien en los detalles. Madrid genera mucha información y una contrainformación que es muy curiosa y hay que saber leer entre líneas.

P.- Trabaja usted tanto que parece una de esas personas de la generación de nuestros padres, que dejaron la vida en el pluriempleo.

R.- Será que no valgo para otra cosa.

P.- ¿El trabajo es la vida del buen periodista?

R.- Sí, creo que sí. Pero bueno, yo soy un tipo que escribe y que, luego, es periodista. Fundamentalmente me dedico a escribir. Eso te lleva a fijarte en muchas cosas.

P.- ¿Cuál es su obra favorita de Mesonero Romanos?

R.- El Manual de Madrid, tengo una edición ilustrada. Pero aquel Madrid no tiene nada que ver con el que tenemos ahora. Para mí, el Madrid moderno, el que me divierte contar, empieza con Gómez de la Serna. Incluso podría remontarme a esa versión cariñosa y amable de la ciudad que tenía Larra.

P.- Sin embargo, siendo usted de Córdoba, ese tomito de Mesonero Romanos que reunía en una misma edición Las escenas matritenses y las andaluzas es de evocación obligada…

R.- En su momento, todos descubrimos a Mesonero Romanos en aquellas páginas.

P.- ¿Les falla la oratoria a nuestros políticos?

R.- Porque les falta discurso. Y les falta discurso porque, a veces, les falta ideología. Una lástima. Uno, que se ha criado viendo otro tipo de políticos -he sido el biógrafo de Julio Anguita y he escrito dos libros junto a él- echa en falta gente con capacidad de oratoria y que, detrás de ella, tengan un discurso. Me revientan esos señores que se dedican a dar titulares y luego, a contradecir el titular de los demás. Echo en falta un debate en profundidad, que a veces lo hay en la Asamblea. Allí sí que hay debates interesantes que, a menudo, tengo la fortuna de cubrir. Hay grandes oradores en la Asamblea.

P.- Me corregirá si me equivoco al decir que en la izquierda hay cierta animadversión hacia nuestra ciudad porque la identifica con el centralismo…

R.- Madrid es una plaza muy importante tanto para la derecha como para la izquierda. Efectivamente, la izquierda ha tenido escaso éxito en estas últimas elecciones. De hecho, los dos cabezas de cartel del PSOE ya no están.

P.- Experto como es usted en televisión, ¿cree que es buena la imagen que proyecta la pequeña pantalla de Madrid?

R.- Depende de qué pequeña pantalla se trate, amigo mío.

P.- ¿Qué le gustaría decir sobre nuestra ciudad, la Villa y Corte?

R.- Me gustaría hablar de Madrid en términos de paz. De un Madrid que no estuviera amenazado por el terrorismo, que no tuviese que recordar el 11-M. Me gustaría hablar de un Madrid más habitable, de un Madrid tolerante de verdad, no de boquilla. De un Madrid donde no existiese la Cañada Real, que me parece la gran favela de Europa.

P.- ¿Qué pregunta no haría nunca a un entrevistado?

R.- Siempre hago todas las preguntas. Si te guardas alguna eres un mal entrevistador. No sé si seré bueno o malo, pero hay que hacer todas las preguntas. Si consigues una reacción airada, te la comes como los toreros, que es tu obligación. Tienes que cruzarte de pitón a pitón con la persona que entrevistas.

P.- ¿Su rincón favorito de la ciudad?

R.- Casa Salvador, de la calle Barbieri.

P.- ¿Por qué no existe una tradición madrileñista como la catalanista?

R.- Porque Madrid se hace con mucha gente que venimos de fuera. Yo soy profundamente andaluz y lo sigo siendo. Aunque me encuentro muy a gusto en Madrid.

——————————————————————————–
RETRATO
Origen. Rute (Córdoba), 1961. Currículo. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense, dejó la carrera de Derecho en tercero para poder escribir. Se inició en la radio en 1984, Radio Cadena Española fue su primera emisora. Antena de Oro por la dirección creativa de Onda Cero, su actividad radiofónica también incluye colaboraciones en la Brújula del mundo con Victoria Prego. Lleva cinco años escribiendo columnas, entrevistas y artículos de opinión en M2. Aficiones. «Leer, callar y observar». Debilidades. «Mis hijos». Virtudes. «Eso que lo digan otros». Defectos. «Soy muy cabezón. A veces tengo ataques de ira, pero se me pasan.».

Compartir: