Entradas en septiembre, 2005


Oficio de modelo

septiembre 7th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Desde hace años IFEMA se viene apuntando el tanto de la organización de la Pasarela Cibeles, empezó de forma tímida compitiendo con Barcelona y hoy ha superado a Gaudí colocándose entre las señeras del mundo: París, Milán, Londres, Nueva York.

Si hacemos cálculos de todos los pases, de todos los desfiles, de las cuarenta y dos ediciones, nos sale un ejército de modelos tan numeroso como los Guerreros de Xián. Y todas con una cara de no estar, de pasar por allí, cuerpos gloriosos sin identidad que prestaban su alegre trotar al servicio de la alta costura, ¿dónde van las modelos cuando termina un desfile?, ¿se las traga la pasarela?, ¿les espera un novio con avión privado o se convierten en chicas anónimas que caminan por los pasillos del metro?, ¿es verdad que comen manzanas y hablan constantemente por su teléfono móvil?

El oficio de modelo consiste en lucir pero sin destacar, todo lo contrario a lo que nos tienen acostumbrado los petardos de la televisión. Su cometido es no ser recordadas, no dejar huella, no ser nadie. Son fantasmas bien vestidas y tan maquilladas como una puerta barroca. Pero, lo mejor es que cuando todo termina, vuelven a la oscuridad de donde vinieron.

Demasiado elegantes para ser obreras y demasiado bellas como para no dejar rastro. Todas ellas con aspecto de secundarias de película de cine negro, algunas quedarían perfectamente bajo la lluvia en una escena de L.A. Confidencial.
Hay que ver la cara de morbo con la que les miran los señores mayores, ahí se entiende que puestos a adorar hay quien prefiere a las santas sin peana.

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Misión imposible

septiembre 6th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Estimado ‘mister’ Cruise: iba a llamarle por teléfono pero me ha dicho Pé que mejor le escriba porque usted lo primero que hace por la mañana al levantarse en Hollywood es leer la prensa española, cuestión que le honra y para que no se diga que los héroes del cine no tienen inquietudes. Sabrá usted que en España somos muy dados a las fusiones, ya sean económicas, políticas o simplemente familiares, (aquello de echarle los tejos a la mujer del vecino con el indiscreto ánimo de ligar con ella).Y, también existen fusiones por absorción, cuando el pez chico se come al pez grande. En este caso el pezqueñín es el Ateneo de Madrid, heroica y longeva institución que ha atravesado por distintas vicisitudes (desde la gloria republicana a las goteras de la transición), pero siempre las ha soportado con la dignidad de una vieja dama británica, a pesar de estar en pleno centro de Madrid. Y el tiburón es la Iglesia de la Cienciología que usted vino a inaugurar hace un año, con gran lujo de pompa y boato.
No hay en este caso razones bíblicas o de conciencia que hagan temblar los cimientos del Ateneo; muy al contrario se temen una fusión a mogollón, como las que hacía sir Drake, una manera de abordar a saco, sin miramientos y ocupando hasta los últimos huecos para posteriormente alzar el pabellón enemigo en la torre más alta. Un abordaje intelectual del que los socios se defienden y recelan de incorporaciones de última hora que vengan a enturbiar el ambiente. Don Tom, no vea en la jugada tensiones religiosas, ni turbias maniobras de la acracia madrileña descreída; más bien son recelos propios de inquilino con renta antigua que teme le pasen un recibo que no pueda pagar. Cualquiera que haya llevado un libro de antropología de una estantería a otra, (sin ser especialista en la obra de Lévi-Strauss), sabe que los colectivos se defienden de las agresiones externas mientras pueden.

Igual le apetece darse otra vuelta por Madrid y pedir la entrada como ateneísta. Ahora bien, tan acostumbrado a la acción parece que los sillones de orejas le van a quedar grandes. En todo caso, en los estatutos no se recogen incompatibilidades a los actores de Hollywood, aunque parezca misión imposible. Le cuento todo esto para ponerle al corriente de la que tenemos liada en este lado del Imperio, y para que sepa que el director del Ateneo llora como Bogart y se pregunta: «¿de todos los locales que hay en Madrid, por qué han tenido que venir al mío?». Lo bueno que tiene el lenguaje del cine es que lo entiende cualquiera, incluso usted.

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JOSÉ RAMON ENCINAR / DIRECTOR DE LA ORQUESTA Y CORO DE LA CAM

septiembre 6th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

‘El himno de Madrid es una marcianada’

«Nuestra ciudad es una polifonía enorme» / «A veces he lamentado más una reconstrucción que un incendio» / «La música no nos hace mejores, seguiremos siendo animales agresivos» / «Dejé la batuta porque sufro vértigo» / «Los timbales son el equivalente a los que cierran los acuerdos de los tripartitos» / «Julio Iglesias me parece un gran plañidero»

Con José Ramón Encinar se puede hablar de muchas cosas y a gran nivel, incluso de música. Igual que Goethe, cree que la música es arquitectura en el tiempo, pero antes que nada valora el silencio.Hace unos años tuvo un infarto y el médico le dijo que corriera todos los días 40 minutos (que lo hiciera como el que se cepilla los dientes), vista su buena forma física se entiende que debe tener unas coronarias como para hacer un anuncio de pasta dentífrica.Aunque vive a 100 metros de la difunta torre Windsor fue el último vecino en enterarse del incendio.
Pregunta.- ¿Aficionado al deporte?

Respuesta.- No, es obligación médica, en realidad lo odio (risas).

P.- ¿A qué suena Madrid?

R.- Madrid suena a fusión de muchas culturas, (el concepto fusión en términos musicales me parece un engendro), pero nuestra ciudad sí que es una polifonía enorme de culturas.

P.- ¿Las máquinas del Windsor tenían ritmo?

R.- Relaciono el ritmo que tenían con la música futurista que hace Rusolo, tenían cierto mecanicismo en la base.

P.- ¿El edificio herido era un buen escenario?

R.- La verdad es que era una ruina bellísima. Alguien propuso dejarlo calcinado como monumento urbano. A veces he lamentado más una reconstrucción que un incendio.

P.- ¿Hay estética en el desguace?

R.- ¡Claro! Si era bonito el Windsor retorcido, mucho más lo fueron las grúas que operaron en él. Adoptaban posiciones de gran belleza plástica.

P.- ¿En la calle saben quién fue Bretón de los Herreros?

R.- No y me parece mal, pero mucho más que no sepan quienes fueron Barbieri o Gaztambide. Fuera de Beethoven les pregunta por Meldenson y tampoco sabrán.

P.- ¿Con más música viviríamos mejor?

R.- Eso es lo que dice Baremboim, pero yo soy más descreído.La música no nos hace mejores, seguiremos siendo animales agresivos.

P.- ¿Un director de orquesta es vanidoso?

R.- En general sí. Mi idea de la vida es que hay que hacer las cosas muy en serio, pero riéndose de uno mismo.

P.- ¿Dirigir sin batuta le hace perder autoridad?

R.- Espero que no, (le preguntaré a los músicos). La dejé porque sufro de vértigo y en algún ensayo salió disparada, motivo de broma para mis músicos. Prefiero que no le caiga a nadie encima.

P.- ¿Toda orquesta es una gran familia?

R.- Debiera, pero no siempre, en todo caso una familia con mala relación. Lo deseable es que lo sean musicalmente.

P.- ¿Hay lucha de clases entre la cuerda y la percusión?

R.- ¡Entre todos!, entre segundos violines y primeros, entre violas y contrabajos, flautines y flautas ¡y no hablemos de los coros!

P.- ¿Se quejan los timbales de estar en el grupo mixto?

R.- ¡Qué va! Son el equivalente a los que cierran los acuerdos de los tripartitos.

P.- Cuando van de gira, ¿cantan en los aviones?

R.- No para mí sería un coñazo, francamente, (risas).

P.- ¿Cree que los madrileños conocen a su orquesta?

R.- Poco, no es culpa suya sino de los medios de comunicación que no dan espacio a sus actuaciones.

P.- ¿Y su himno regional?

R.- El himno es (dicho con respeto) una marcianada. La música es de Pablo Solozábal, que no es madrileño y la letra es del mayor ácrata del país: Agustín García Calvo.

P.- ¿Qué música lleva en el coche?

R.- De todo, en este momento llevo 15 discos para saber si los programo.

P.- ¿Ningún disco de pop?

R.- Detesto el pop y el rock.

P.- ¿No le gusta Sabina?

R.- Muy poquito, será envidia insana. Una cosa es la música de consumo y otra la culta, y ahí soy un absoluto aristócrata. La música es para elites, para quién quiera realizar el esfuerzo de adquirir conocimiento.

P.- ¿Contrataría a Bisbal como solista?

R.- No le he escuchado nunca, pero con seguridad no (risas).

P.- ¿Y a Julio Iglesias?

R.- Su música me parece un llanto agradable, un gran plañidero.

P.- ¿La música ambiental mientras come?

R.- Hace poco pregunté en La Coruña: ¿tienen música ambiental?, y como me dijeron que sí, me marché del restaurante.

P.- ¿Es verdad que amansa a las fieras?

R.- A algunas se les puede atontar con polifonía clásica, entre ellas el gregoriano.

P.- ¿Ha conocido alguna fiera?

R.- Se convive habitualmente con ellas.

P.- Escribía Jardiel: «Había cuatro personas y un músico».

R.- (Risas), es casi como lo que decía Enrique Correa: «Por lo demás bien».

RETRATO

Orígenes. Madrid, 1954. Currículo. Se formó en el conservatorio de Madrid pero se hizo mayor de edad en Milán y en Siena. A pesar de su juventud, ha dirigido casi todas las orquestas nacionales en España, y también la Filarmónica de México, la Nacional de Argentina o la Sinfónica de Londres. También es compositor de varias obras. Desde enero de 2003 es académico de la Real Academia de las Bellas Artes de San Fernando. Debilidades. «Con todo lo que conlleva: mi hija». Aficiones. «Lectura, la Historia, la pintura». Virtudes. «Soy trabajador». Defectos. «¡Buf!, muchos.A veces soberbio y a veces excesivamente humilde».

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El señor de los humillos

septiembre 5th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Estimado pirómano: si damos por sentado que hay más clases de tontos que de quesos, tú eres uno de ellos, un queso ahumado o un tonto con mecha (a elegir). De las múltiples formas que hay de pasar a la posteridad has elegido la peor para el medio ambiente; a ti la capa de ozono, la desertización y el ecosistema, te importan dos colillas mal apagadas. La policía te acusa de provocar 30 incendios en la Sierra de Madrid y no han sido más porque te han echado el guante encima. A ti, pequeño Nerón de las narices, ni te ha importado la sequía comparable con la del año 47, ni has tenido en cuenta la cantidad de agua y medios que se han utilizado para apagar tus fechorías. Se supone que algo hay en el interior de los pirómanos que os pone como una moto cuando el bosque echa humo, y más aún cuando veis vuestras hazañas en fotos; por lo tanto no seré yo quién alimente tu currículo con cuatro adjetivos imborrables. Si fueran ciertos los cargos que te imputan te convertirás en el enemigo público número uno, incluso más que los locos del volante a los que la DGT compara con Lee Harvey Oswald.
Una vez más se comprueba que el presunto chorizo no andaba lejos, incluso que trabajaba en los retenes forestales, ¿qué mayor morbo que contemplar la obra que ha construido uno? Con dos narices te apuntabas a la causa de todos contra el fuego después de haber sido el causante del incendio, incluso hasta es posible que insultaras al hijo de Satán que había provocado aquello. No te importaba ver la angustia de tus compañeros de retén, ni escuchar las voces de desamparo de los vecinos: cuánto más ruido hicieran las copas de los árboles y más bajo fuera el vuelo de los aviones, mejor.En la orgía un tanto apocalíptica del fuego encontrabas un placer sin límite, un orgasmo en llamas. En cierta medida es sadismo medioambiental: con la ceniza caliente se te ponía dura la manguera.

Ignoro cuál es la condena para un pirómano, supongo que alejarlo de las cajas de cerillas y retirarle el pasaporte para las Fallas de Valencia, pero por si el juez fuera persona creativa propongo que el castigo consista en disfrazarlo de Robin Hood y llevarlo por los colegios dando charlas acerca de las ventajas de los prados, los encantos de los gnomos, hadas y otros seres del bosque.Por supuesto que allá donde había un árbol pongas otro, así hasta conseguir que la clorofilia venza al morbo. Aunque no estaría mal plantarte en una maceta, dejarte en un prado y ver cómo te las apañas en un verano tan seco.

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Casualmente todas las víctimas son negros o pobres

septiembre 4th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

PARA interpretar la realidad de los Estados Unidos serían más útiles los consejos de un brujo sioux que los de un economista de Wall Street. Las palabras del acalde de Nueva Orleáns en las que pedía “que alguien mueva su culo, ya sea gobernador o presidente, y venga hasta aquí”, son para incluirlas como enmiendas de la Constitución del país que pasa por ser cuna de la libertad y potencia del orbe. Esto último ya no es cierto, en Estados Unidos no funciona la sanidad, está en quiebra la seguridad social, la libertad es un chiste y la igualdad ya vemos en qué charco se ahoga.
¿Es casualidad que todas las víctimas que salen por televisión sean negros, pobres o hispanos? ¿Qué diríamos de un país europeo que no tuviera una buena red de transporte público? ¿A quién le importaba que los diques de contención del agua llevaran años sin revisar porque el dinero se va a renovar cañones y uniformes? En Estados Unidos la cuestión pública, la calle, se ha abandonado a merced de pobres y transeúntes. Ignoran lo que en Europa le dedicamos tanto tiempo de nuestro debate y que viene arrastrando desde el siglo XIX: la construcción de un espacio público común. Ellos, en cambio, optaron por el individualismo y así les luce el pelo. Ya quisieran tener un tren de alta velocidad de última generación como en Japón, o en Europa, o unos aeropuertos como los que manejamos por aquí. En la ciudad de Miami los bomberos dependen de cada barrio, y así los más ricos tienen unos medios espectaculares y los desfavorecidos poco menos que se manejan con cubas de antes de la II Guerra Mundial.

Al traje del tío Sam le salen brillos y se le han descosido los bajos. Y a todo esto la imagen de Bush sobrevolando la zona en el Air Force One, recuerda el final de El Planeta de los Simios, cuando Charlton Heston se pasma ante la Estatua de la Liberad hundida. Bush en su avión era un mono pasmado.

Dos meteorólogos de cierto prestigio, Philip Klotzbach y William Gray, dicen que existe un 43 por ciento de posibilidades de que llegue otro huracán mayor que Katrina en septiembre, y para entonces no habrán terminado de recoger cadáveres, sería como echar sal en una herida abierta. Mientras tanto la única orden práctica que se ha dado es que el Ejército tire a matar si fuera necesario, (en algunos casos llegarán tarde porque ya estarán muertos). La paradoja liberal aflora de una manera hedionda, ya no es un pobre submarino ruso, ni un ciclón en Asia, ni siquiera inundaciones en África. Ver a la primera potencia de rodillas nos lleva a preguntarnos si tan poderoso es Estados Unidos, o tan caóticos sus gobernantes. Los supervivientes serán unos descreídos y la mayor base crítica de Bush? una semana después incapaz de poner sus pies (o su culo) en Nueva Orleáns.

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Carlos Jiménez con bola de hierro

septiembre 3rd, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Partamos de un hecho objetivo: Estudiantes es el mejor club de baloncesto de España, pero admitamos que algunos, a riesgo de perder el paraíso, quieran buscar acomodo en otros equipos. Desde que un primo de Adán lanzó un hueso de mamut a lo alto de un nido y dio origen al baloncesto, el trasvase de jugadores estudiantiles al Madrid ha sido largo, extenso, doloroso para el club pero también inagotable, constante, beneficioso para los jugadores y para las arcas estudiantiles. Recordemos que en uno de los momentos en los que el equipo estuvo peor, el Real Madrid compró a Alberto Herreros y aquel dinerito hizo milagros.
La última bronca está servida a cuenta de Carlos Jiménez, jugador señero del club de la calle de Serrano que quiere hacer mudanza a Chamartín. Lo curioso de este asunto es que un trabajador lo tiene complicado cuando se quiere marchar, es un pájaro en jaula de oro. No basta con su voluntad de salir, ni con sus buenas palabras. De repente el que había sido un santo y seña se convierte en un tipo extraño al que se le niega el pan y la sal, (esto es: su pasado y su valía). Retener a un trabajador contra su voluntad, además de un secuestro laboral, es una memez. Nadie le puede poner puertas al campo, si se quiere ir del equipo tarde o temprano lo hará. La diferencia está en los modos y en la forma de responder de la directiva. Una vez que las canciones de Joaquín Sabina nos tienen enseñado que no hay amor que 100 años dure, (todo lo más, 19 días y 500 noches), ni pasión que no se oxide como un muelle, deberíamos acostumbrarnos a que también los jugadores quieran cambiar de aires. La misión del aficionado es apoyar, la de la directiva defender un club y la del jugador velar por sus intereses: si cruzamos esos argumentos nos sale un batiburrillo insufrible. Ni los jugadores son forofos, ni los socios pueden llevar un club, ni su presidente actuar como un señorito de plantación.

Otra cosa sería poner un hierro candente a los jugadores en el glúteo con el escudo de cada entidad, pero no creo que estuvieran por la labor, más que nada por lo que escuece. Dice el presidente estudiantil, Fernando Bermúdez, que estudia romper relaciones diplomáticas con el Madrid. Sería curioso porque ahora con Ramón Calderón de presidente es cuando mejor han ido las relaciones; no se le conoce enemigo a Calderón, que es persona de temple y señor de palabra. En el pasado hubo razones para caminar en peregrinación con antorchas hasta la calle Concha Espina y liar una como en el final de Frankestein, pero si entonces no se hizo ¿por qué ahora?

El Estu es un club donde se forma la mejor cantera de España.El Madrid es otra cosa, galaxia aparte, juega la otra Liga. Carlos Jiménez quiere probarse vestido de blanco. ¿Quién lo impedirá? Igual que lo hicieron los hermanos Martín, Reyes, Antúnez, Orenga, etc Volvamos a la idea inicial: Estudiantes es el mejor club de baloncesto, y si no que le dé un catarro a John Pinone, pero algunos osan enfrentarse a la lógica, (dementes hasta en sus últimos actos), y se quieren ir. Insólito, pero real (Madrid).No vamos a estar pidiendo libertad para los presos de Guantánamo y, a la vez, una bola de hierro para el tobillo de Carlos Jiménez.

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Olga Ramos

septiembre 1st, 2005 - Sin categoría - 4 Comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Sabina prefirió cantar con Chavela Vargas que con Olga Ramos, pero ahora que la hemos perdido (y con ella una tradición muy castiza), es posible que afloren nuestras carencias sentimentales. Olga Ramos tuvo a bien conservar un canto muy chulo pero propio de otros tiempos: sin gasógeno, tranvía, el bar de Perico Chicote, los isidros, violeteras, aguadores y castañeras, es difícil entender la letra de un chotis o de un cuplé.

Ella se pasó toda la vida recuperando la mejor tradición de un género que se entierra en su misma cajita de madera. Tampoco hoy sabemos que cantaban los árabes junto a las murallas de la calle Segovia, pero alguien les debió amenizar aquellas tórridas noches de verano en el Imperio.

“Adiós Madrid que te queas sin gente” decía un personaje de Zarzuela. Efectivamente aquellos del pañuelo en el bolsillo, la gorra chulapa, la flor en el ojal y adictos al vermouth de grifo, ha desaparecido. Serán cosas del cambio generacional pero hoy creo que hemos sido injustos y cabritos con Olga Ramos. En este caso el bacalao se comió al pez chico y el teclado al organillo.

Cada vez que cerraban una cafetería histórica apuñalaban a Olga Ramos. En todo caso espero que se fuera de esta vida a buscar la pulga a la otra, y con el sentimiento de que una vez cantado todo su repertorio, la vida fuera para ella “una cosa chipén”.

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