Entradas en marzo, 2005


El futuro tiene color amarillo

marzo 20th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

En una página “güé” china (naturalmente redactada en riguroso chino) se pregonan las excelencias de la tierra salmantina y se invita al turismo a visitar Salamanca como destino privilegiado. Prueba de la inteligencia del pueblo chino es que buscan cultura y tradiciones por encima de sol y playa (el turista chanquete pierde posiciones en la tabla del ocio). Para llegar a esta conclusión Salamanca no ha tenido que hacer mayor campaña que estar donde siempre estuvo, en el lado de la cultura, de la inteligencia, del arte y la estética. Ésas son las claves que vienen a buscar los turistas de ese país, que podría ser un continente, llamado China, aislado durante siglos pero con hambre de conocimiento. Cuando hablan de surcar el espacio con naves tripuladas a la búsqueda de vida inteligente más allá de la galaxia conocida, me entra la duda patatera de si no haríamos mejor conociendo antes nuestro entorno. Para un salmantino las costumbres de un ciudadano del Sur de China son tan fantásticas como el otro lado de la luna. Nosotros no pasamos de los tópicos de una carta de restaurante oriental donde los platos aparecen escritos en unos simpáticos caracteres que se nos antojan dibujos abstractos cargados de simbología desconocida. Tan extraños nos resulta el chino que tendríamos las mismas oportunidades de “no comunicarnos” con ellos o con un marciano, pero no hablamos de un planeta remoto sino de un entorno humano que comparte con nosotros las vueltas que da esta cansada, (cruel a veces) pero bendita tierra. Y por lo tanto estamos condenados felizmente a entendernos. Dicho sea todo esto con gran simpatía puesto que los chinos hacen un esfuerzo colosal por acercarse hasta aquí: son muchas horas en avión, es un viaje caro, se van a encontrar con una cultura desconocida (y con la ausencia de buenas comunicaciones…) El esfuerzo es plausible si tenemos en cuenta que para tumbarse en una playa les hacen falta menos adaptaciones. Salamanca le puede ofrecer a China una forma inteligente de entender la vida, un estilo castellano sereno que pasa por construir un imperio y luego saber aceptar el pasado. Aquí no hay murallas kilométricas ni guerreros de Xián, no hay fiestas del dragón ni elogios a la pólvora, pero estoy convencido de que el descubrimiento va a ser de ida y vuelta. Sanghai es Salamanca con más chinitos, Salamanca es Sanghai con más salero. Pongamos todo lo necesario para que acepten viajar hasta este remoto rincón del planeta que se dispone a inaugurar la primavera, el “rollito primavera” en su sentido más lujurioso ya está aquí. Y ahora a ver cómo traducen lo del “rollito” a su página “güé”.

Compartir:


Franco a pie

marzo 17th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Franco fue un estorbo, pero no como estatua sino como dictador. Como mandatario fue una pesadilla que duró mil años concentrados en cuarenta tomos del calendario. Pero cuando hubo motivos para apearlo del pedestal, en vida, nadie tuvo narices de bajarlo y ahora han tenido que acudir a la estrategia del ataque “al alba y con fuerte viento de levante”. Han tenido que esperar a que se jubilara el último furriel de la Guardia Mora para atacar al tirano por la base. Prueba de que el franquismo sociológico continúa es que para desmontar la estatua han acudido al amparo de la madrugada.

Franco fue un dictador de la peor calaña que mandó al paredón a la mejor juventud de los años treinta (de uno y otro bando), pero el franquismo no se ha terminado de desmontar, ni mucho menos.

Pero una estatua a nadie le molesta, incluso el diablo tiene una en el Retiro. Si nos ponemos a hacer revisionismo histórico a fondo, no queda un cuadro sano en el Museo del Prado.

Franco ha muerto en la Castellana. Se me ocurre acudir a aquel anuncio en el que un vejete preguntaba: “¿y a todo esto, Franco qué dice?”.

Compartir:


El vino con gas me duele

marzo 17th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

«Me pararon en un control de alcoholemia. Expliqué a la policía a lo que me dedicaba, pero di cero» / «El paladar es un deporte que consiste en catar y memorizar» / «He tomado tinto de verano porque todo en la vida tiene su momento» / «Una enóloga dijo: ‘Con este vino he visto a Dios’ / «El vino en ‘tetrabrik’ tiene muchas ventajas, no se le estropea el corcho» ‘
————————————————————————————-

Esta joven de buen gusto maneja el paladar como arma de trabajo, el cerebro como bodega de recuerdos y las manos para acunar botellas de vino como el que coge a un bebé. Es de las primeras mujeres sumilleres, trabaja en el restaurante La Terraza del Casino de Madrid, en la calle de Alcalá (donde empezó de recepcionista hace seis años). Su local está asesorado por Ferran Adrià y luce una estrella Michelín.
Pregunta.- ¿Tiene carné de conducir?

Respuesta.- Sí, y lo uso porque vengo a trabajar en coche.

P.- ¿Le han parado en un control de alcoholemia?

R.- Una vez y justo al salir del trabajo. Expliqué a la policía a lo que me dedicaba, pero di cero en el alcoholímetro.

P.- Luego existen los milagros

R.- No, es que trabajamos siempre después de comer y después de cenar. Y no pruebo todos los vinos que abro. Si conozco la cosecha y el corcho está bien, normalmente no lo pruebo.

P.- ¿Le pararon en buen momento?

R.- Desde luego, si lo hacen después de ciertas catas habría tenido algún problema. Mis colegas en Francia tienen una tasa mayor permitida.

P.- Da igual la tasa, ¿borrachitos son?

R.- Sí, pero borrachitos profesionales.

P.- ¿Su trabajo es un chollo?

R.- Pues mire que no, no me gusta el horario. Trabajamos con horario partido, tenemos viajes, luego hay catas, etc

P.- ¿Y qué hace con los diez minutos que le sobran?

R.- Doy clase de inglés en el Casino y el resto, ya procuro liarme yo solita.

P.- ¿El vino es un ser vivo?

R.- Es un líquido que está dentro de una botella, depende de cuándo la abras, el resultado es diferente.

P.- ¿Todos tenemos igual paladar?

R.- El paladar se hace, es un deporte que consiste en catar y memorizar lo que puedas.

P.- ¿Fantasmean los clientes cuando quieren epatar a su pareja?

R.- (Risas) Alguna vez lo he visto porque el vino hoy es un poco fashion.

P.- ¿El cliente siempre tiene la razón?

R.- Hay que torear un poquito, tú sabes que ese vino no está mal, aunque el cliente pide devolver la botella. De la forma más diplomática le explico que el vino está bien pero se lo cambiamos porque no es de su gusto.

P.- ¿Exigimos más a la bebida que a la comida?

R.- Sin duda, cuando toman la comanda de la mesa todo es más rápido.

P.- ¿Qué cosas no traga?

R.- ¡El caviar, por ejemplo!

P.- ¿Siente piedad por los abstemios?

R.- ¡Ah, no pasa nada! Me gusta que la gente tome vino porque es cultura y salud (en su justa dosis).

P.- ¿Y si le pongo gaseosa?

R.- El vino con gas me duele.

P.- ¿Ha tomado tinto de verano?

R.- Sí, claro, todo en esta vida tiene su momento. De barbacoa con los amigos me parece fantástico. Ahora, en La Terraza, si alguien pide gaseosa para un vino que cuesta 120 euros digo que no.

P.- ¿Hay genios dentro de una botella?

R.- No puedes decir: Es el mejor vino que he probado en mi vida, siempre habrá otro. Guardo memoria de los que me emocionan.

P.- ¿Hasta el límite del llanto?

R.- Probé un Oporto de 1825 y juro que se me puso la carne de gallina. Pensar en quién se ocupó de aquella vendimia impresiona.

P.- ¿Entiende por qué lo prohíbe el islam?

R.- No lo puedo entender, pero luego llegan a mi restaurante y lo piden.

P.- ¿Por qué Moratinos recomienda el Burdeos?

R.- A mí me gustan más otros, pero entiendo que son muy recomendables.

P.- ¿No hay buenos vinos en España?

R.- Sin duda, se ha mejorado mucho en ese campo. En muchas partes de España se lucha por crear buenos vinos.

P.- ¿Qué ventaja tiene el vino en tetrabrik?

R.- ¡Muchas! Entre otras, no se les estropea el corcho (risas).

P.- ¿Un vino caro deja resaca?

R.- No, deja resaca la copa de después. Sólo los vinos de Jerez producen cierto dolor de cabeza por una sustancia que les acompaña.

P.- ¿Se bebe para olvidar?

R.- Desgraciadamente sí, pero es una pena. Realmente no se olvida, sino que dejas de ser tú mismo.

P.- ¿El cielo está en la boca?

R.- A una enóloga exagerada le escuché decir: «Con este vino he visto a Dios». Alguno puede llevarte al cielo (risas).

P.- ¿Puedes pedir llevarte la botella?

R.- Si sobra vino no sé por qué la gente no lo hace. Se pueden llevar la botella vacía o el corcho, pero nunca lo que sobra.

P.- ¿Ha hecho botellón?

R.- ¡Sí cuando era estudiante! En la fiesta de Agrícolas. No creo que nadie guarde una foto de aquello (risas).

RETRATO

Orígenes. Vitoria, 1971. Currículo. Estudios de ingeniero agrícola, especialidad de industrias alimentarias en la Politécnica de Madrid. Luego empezó Ciencias y Tecnología de los Alimentos en la Facultad de Veterinaria; «como quería trabajar, entré en la recepción del Casino». Luego pasó a encargarse de la bodega.«Cuando empecé éramos muy pocas, cuatro chicas de 40 en la clase». Aficiones.«Viajar, viajar, viajar sobre todo a Isla Mauricio». Debilidades.«Un buen vino de los que llegan a emocionar». Virtudes. «Soy una persona muy normal». Defectos. «Muy testaruda, tengo que llegar hasta el final».

Compartir:


Trini no camina sola

marzo 16th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Estimada Trinidad Jiménez: debería usted hacer más paseos urbanos como el de ayer porque se le da muy bien el cuerpo a cuerpo con el madrileño. No lo digo por las encuestas que le igualan con Esperanza Aguirre, (que también), sino por su atractivo personal que es la mejor bandera que tiene el PSOE en el Ayuntamiento de Madrid. Desde aquella foto con la chupa de cuero, a la fecha, usted se ha ganado el cariño local entre otras cosas porque le ha tocado bailar con la más fea; Alberto Ruiz Gallardón es un rival duro de batir porque consigue conjugar los afectos de los no peperos con el entusiasmo del militante. Y a usted le corresponde hacer oposición en un Ayuntamiento que por encima tiene una Comunidad del PP y un Gobierno de la nación socialista. Y por esa extraña solidaridad en lo chungo que tiene la política si a Moratinos le da por decir que le gusta el vino de Burdeos usted tiene que aguantar la broma en los plenos.
Vocación por Madrid no le falta y la tiene acreditada. Veremos hasta dónde puede aguantar su palabra y no dejarse llevar por cantos de sirena que a veces son carteras de ministro. Sabida es la obediencia debida, casi la fidelidad ciega que exige un partido a sus altos dirigentes, pero sería una locura que después de hacer la mili en el Ayuntamiento lo dejara para dedicarse a lo que Ferraz mande. Es posible que en la subida de su valoración ciudadana afecte también la llamada del maligno, que la gente le estime más porque tenga miedo a perderla. En ese sentido Gallardón sería el primero en felicitarle si opta por otro camino distinto.Me consta su cabezonería: usted se ha propuesto ser la primera alcaldesa de la ciudad y andando el tiempo la veremos de regidora.

Denuncia que el centro de Madrid carece de planes y de ideas, que el Ayuntamiento se mueve por impulsos de zahorí más que por medidas pensadas y necesarias. Se pasea en la incongruencia de cortar el tráfico en la calle Alcalá para demostrar que siempre hay un camino a la izquierda, la calle Sevilla. Acude usted al polideportivo de Latina donde lo único olímpico que existe son las colas para entrar, si todos los habitantes del barrio quisieran hacer deporte no pasarían del embudo de la recepción. Pequeñas contradicciones de esta ciudad que aspira a los anillos con más voluntad que instalaciones. Trinidad ya es la Trini castiza nacida en Málaga, el primer paso para el cariño es que a uno le llamen por el diminutivo pero le aprecien por lo superlativo

Compartir:


Nos quedamos sin boda

marzo 15th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Dicen los ingleses que no van a ofrecer imágenes de la boda entre la joven pareja Carlos y Camila, ni para nosotros ni para ellos, punto pelota. La Casa Real británica debe estar un poco hasta la coronilla de las chanzas que le sacan a los tortolitos y ha dicho que si nos queremos cachondear, que compremos una cinta con los carnavales de Cádiz.

Porque no está Cascos de ministro? si no, éstos se enteran. ¿Quién va a invocar el interés general de los europeos dispuestos a ver la boda comiendo pipas? ¿Alguien ha pensado en el llenazo que iban a tener los bares de copas ofreciendo distintos ángulos de la ceremonia?

Si instalan una pantalla gigante en el Bernabéu habría colas hasta Getafe (dicho sea sin la menor intención de tocar las narices), y además sería una forma de ver felices a los socios del Real Madrid. Algunas fuentes generalmente “mal informadas” dicen que los galácticos van a grabar unos episodios de ‘Aquí no hay quién viva’.

La boda es una lástima que nos la vayamos a perder porque desde Sisí no se conocía otro talle tan fino como el de Camila Parker. Igual luego la venden como un vídeo de naturaleza salvaje.

Compartir:


El consejero desaconsejado

marzo 14th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Estimado señor Fisas… consejero de Cultura y Deporte: le han colado un gol por toda la escuadra, un tiro oblicuo y con efecto contrario. No está bonito contratar ilegales para que le hagan limpieza en el Palacio de Deportes, que una cosa es el espíritu olímpico que a todos nos envuelve y otra pasar «olímpicamente» de la normativa laboral vigente. Dice usted que no los volverá a contratar, claro, entre otras cosas porque los expulsarán por tener menos papeles que una liebre. Y luego dirán que el Gobierno de Zapatero persigue a la Comunidad de Madrid con saña cuando la verdad es que a veces se lo ponen a huevo.
El asunto es un poco de los hermanos Marx: la parte contratante de la primera parte hace lo propio con un empresario (segunda parte contratante) que a su vez contrata a unos trabajadores sin papeles (tercera parte contratante). Se crea así una cadena laboral que afecta a todos los firmantes y los convierte en pasajeros de una misma metedura de pata. Groucho Marx lo diría más deprisa y fumándose un puro; la policía lo ha hecho más lento y comprobando pasaportes: el resultado es el mismo. Dicho en lenguaje más académico, es el llamado efecto mariposa de la política regional: cuando un empresario ligado con la administración, aunque sea por contrato puntual de obra, pone a barrer a un ilegal el ligero polvillo que levanta éste se convierte en huracán cuando llega al despacho del consejero.

Ahora ya conocemos los orígenes de ese ventarrón que azotó los cristales de su despacho, y sólo los suyos, en una tarde de calma en la calle Alcalá. O mucho me equivoco o le va a tocar dar explicaciones en la Asamblea de Vallecas acerca de este malentendido pegajoso, turbio, incómodo e inoportuno. Además, la empresa contratada no era la primera vez que trabajaba con la Consejería, por lo tanto habrá que explicar los orígenes de esa bonita amistad.No vale pedir excusas como un caballero que acaba de manchar el traje de una dama con su gin-tonic, tal y como pasa en las películas inglesas.

Si esta Semana Santa vemos penitentes con una escoba en lugar de con una cruz al hombro, sabremos que los ha enviado usted a expiar sus pecados: serán los que le aconsejaron la empresa de limpieza. A partir de ahora seguro que usted exigirá papeles en regla, certificado de buena gente, uñas limpias, radiografía del alma, ADN en condiciones, garantía de caries y prueba de orina (hecha in situ para que no le engañen con el sexo).

Compartir:


¿Quién tiene mi porciento?

marzo 13th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

DESPUÉS de que CiU retirase la querella contra Maragall y que el PP hiciera tres cuartos de lo mismo con la moción de censura, el ciudadano de a pie (conocido como “paganini” por su afición a apoquinar impuestos) se pregunta si todo no habrá sido un tejemaneje entre iguales. Aquí nadie aclara quién ni cómo se ha llevado el tres por ciento de las obras públicas, pero la clase política salva los muebles de la inundación antes de que lleguen las nubes. “¡Tongo!” se ha escuchado desde una de las esquinas de España, país invertebrado para todo menos para poner la mano. La verdad es que el asunto mosquea, aquí huele a Rinconete y Cortadillo en su versión de Trinconcete y Raspadillo agencia de colocación de marrones y cobro de porcentajes. Por debajo de la economía real circula una sumergida que proporciona pingües beneficios. Lo que han descubierto en Marbella es otro agujero negro pero lleno de petróleo, dólares, piratas y cobradores de maletín. Un nuevo caso digno de Torrente si no fuera porque las detenciones son reales y los implicados muy conocidos en la sociedad de la Costa del Sol. Aquí nos encontramos de nuevo con otro arcano: en Marbella se ha vivido durante años con un nivel de renta ficticio que proporcionaban los ingresos de cualquier índole. Gil, que para sus asuntos tenía cierto sentido del humor, podía haber montado un parque temático de la “cosa nostra”. Según parece los había de toda clase y jaez: calabresa, rusa, centroeuropea, árabe, asiática y nacional. Todos ellos se cruzaban en sus potentes coches con su correspondiente rubia de bote y pagaban al contado en una catarata de lujo interminable, gastaban incluso cuando no tenían necesidad. El ciudadano atado a la nómina y cogido por los perendengues de Hacienda sospecha que hay otra vida mejor que ésta y que no necesariamente tiene que morir para conocerla. Es la vida al margen de la legalidad de los comisionistas, los mafiosos y los que trincan sin pudor alguno aquello que no es suyo. Y lo peor de todo es la sensación de que nunca sabremos qué parte del producto nacional bruto la forma ese dinero oscuro. Por el bien de la confianza en la clase política y en el respeto que nos debemos todos deberían aclararse las sospechas. Lo peor que podría pasar es que en el Carmel echaran cemento sin dar explicaciones y sobre las comisiones pusieran consenso sin más palabras. Era Sabina el que cantaba “¿quién me ha robado el mes de abril?”, poco hurto parece según están las cosas, más bien parece que nos han levantado varias hojas del calendario. El mamoneo nacional es la corruptela del baratillo, lo que circula sin que lo veamos, la mano que entorpece la cuna.

Compartir:


Madrid en la memoria

marzo 11th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Me gusta la ciudad de los vivos y detesto la que hace espectáculo con los muertos. Antes que reformar la Constitución, no estaría de más plantearse una reforma del calendario para eludir pasar por el 11-M, que es fecha de infausto recuerdo. Aquel día del que hace un año la muerte llegó a Madrid muy barata, por el precio de un billete de tren, se segó la biografía de cientos de madrileños? y se mutiló la ilusión de muchos miles más.

Todavía los hay que dependen de ansiolíticos para descansar, los que tienen que buscar ayuda psicológica, los que han perdido toda esperanza. A ellos me refiero. Por ellos no hay derecho a convertir el aniversario en feria mediática de la sangre.

Duele marzo, aunque tímidamente salga el sol y las temperaturas se recuperen. Duele porque todavía las heridas no han cicatrizado y porque los políticos no se ponen de acuerdo.

Madrid en la memoria es una postal de unas vías por las que nunca llegará ese tren en el que íbamos todos. El hueco es un vacío en el estómago, mariposas negras que chocan contra sus paredes.

Compartir:


Cuestión de piel

marzo 11th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Estimados padres de familia: la Comunidad de Madrid, previa consulta a las más altas magistraturas, se ha puesto de su parte en el conflicto del piercing de sus hijos: «¡Niño que no y se acabó!».Al menos mientras sean menores de edad y dependan de la custodia familiar. El asunto había llegado tan lejos que algunos chicos se gastaban más en ferretería que en ropa, horadándose las partes blandas de su anatomía hasta el límite de un faquir. No quiero extenderme en la descripción del proceso, pero en las escrituras sagradas con menos ya te hacían mártir, no era necesario llegar a tanto: agujas que abren surcos, marcas a fuego, hierros incandescentes, bisturís afilados. Eso se acabó mientras el niño sea niño; cuando cumpla la mayoría de edad es libre para dejar de ser adulto y convertirse en caja de herramientas. Hasta los gusanos se transforman en algo más agradable.
Todas las edades han tenido un punto rebelde, lo que pasa es que cada generación tiene que adoptar una seña de identidad que la distinga de las anteriores. Se trata de un proceso iniciático hacia la madurez de forma inconsciente; los que hayan visto muchas películas de sioux lo entenderán a la primera: consiste en pintarse colores de guerra. Quizá en su generación lo rompedor fueron los pantalones campana tipo Travolta, y en la anterior el pelo largo y un novio inglés, y en la anterior fumar por la calle.Lo del piercing es lo que toca hoy. La Comunidad trata de evitar que se haga negocio con la salud de los adolescentes y que éstos no sufran las consecuencias de por vida. Su madre se liberó de tener que reivindicar su causa generacional al dejar de ir sentada de lado en una vespa, y su padre en cuanto se quitó los pantalones campana; ninguno de los dos tuvo mayores consecuencias salvo la coña cuando enseñan el álbum de fotos familiar. En cambio, sus hijos horadados llevarán de por vida la marca que le hizo un matarife para ponerle un anillo de watusi en el esfínter nasal.

Corta parece que se queda la Comunidad de Madrid. Ya puestos a regular el conflicto intergeneracional, debería crear doña Esperanza una Consejería de Adolescentes con una dirección general de Mis primeros granitos, otra de Mis padres no me entienden y una tercera de No sé por qué no puedo hacer fiestas en casa, ¡jó!. O nos ponemos en serio o para ese viaje no hacían falta alforjas. Solucionado este conflicto que nos tenía tan preocupados vayamos ahora a buscar remedio a otros parecidos, la maquinaria de la educación debe permanecer alerta.

Compartir:


El manta del automóvil

marzo 10th, 2005 - Sin categoría - Sin comentarios

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Amigo que quieres vender un coche en la calle: nos han fastidiado a los dos. A ti porque no te van a permitir anunciar las maravillas de tu bólido y a mí, porque debo ser el único ciudadano que se lee todo lo que dicen los carteles de venta. La literatura de cartelito me produce una gran emoción. Primero, por el diseño, luego por las horas que se echan pensando en el texto y, finalmente, por el mensaje. Vender una burra coja como si fuera un deportivo de importación tiene mucho arte y esta ciudad es experta en colar trolas a módico precio, la cultura del Rastro marca mucho. Me fascina cuando dice «duerme en garaje», ahí me lo imagino tapado con una mantita de lana. El colmo del paroxismo es cuando leo «me venden» como si el coche hablara para dar pena, y ya si incluye alguna falta de ortografía soy capaz de arañarme la cara de la emoción.
Sucede (no lo digo por usted que es vendedor ocasional) que hay mucho listillo que ocupa asfalto con un verdadero negocio paralelo.Y el Ayuntamiento, que no es tonto, se ha coscado del top auto, del manta del automóvil que se produce en calles, a las que sólo les falta cambiar el nombre por el de una marca de coches. Y, por lo tanto, van a prohibir que algunos pasen por humildes particulares cuando en realidad enmascaran un negocio que no paga impuestos.No creo que haya madrileño que tenga la imperiosa necesidad de desprenderse de cinco coches a la vez, salvo que sea un concursante del Un, Dos, Tres, (pero hace tanto tiempo que se acabó el programa, que no es posible). Ahí entra el razonable mosqueo de los concesionarios oficiales que trabajan dentro de la legalidad. Aunque, eso sí, abandonando todo tipo de literatura entorno al coche usado, algo que es lamentable.

Su coche no puede ser el toro de Osborne plantado en un mismo sitio porque las vías públicas son de todos y nadie puede hacerse una parcelita en un rincón de Madrid. Hay algunos que dejaron el coche cuando Franco tenía flebitis y todavía no han pasado a quitarle el polvo. Si repasa sus fotos de primera comunión, verá que ya entonces estaban aparcados frente al portal de su casa. Llenando las calles de coches forrados con carteles de venta también se contribuye a una contaminación visual. Primero fueron a por los luminosos horribles que estropeaban la mirada, sobre todo los de depilaciones y callistas (con juanetes fluorescentes) y ahora van a por los ilegales de las cuatro ruedas. Aunque la literatura popular se resienta.

Compartir: